No inviertas en formación para mejorar a nivel profesional
¿Recuerdas aquel maravillo día en el que das por terminada tu formación universitaria? ¿La última asignatura aprobada? ¿El proyecto o trabajo fin de carrera defendido? ¿Los libros cerrados y la ilusión de no volver a estudiar nunca más? Yo lo recuerdo perfectamente. Junto con la sensación de ¿Y ahora qué?. Ya no volveré a estudiar más!! Que ilusión empieza mi vida laboral!!! Vaya tiempos aquellos. En seguida me di cuenta de que no había hecho más que comenzar mi verdadera vida de estudiante. Que las carreras que iba estudiar esta vez, eran la de la empresa, la de los negocios y la más importante, la de la vida.
Siempre he considerado que un examen es un medio desacertado de medir el conocimiento. O lo que es más importante, la capacidad de resolución. En el colegio y/o universidad, se nos enseña (de manera individual) a resolver un problema con un enunciado específico, unos datos determinados y una única solución. Pero resulta que cuando te enfrentas a la vida real, el enunciado está incompleto, los datos son confusos o erróneos y la solución o no es única o se puede resolver de varias maneras. ¿Y ahora qué hago? Nadie me contó esto antes….
Desde el día en el que di por finalizada mi relación con la universidad, he estudiado sobre diferentes temas. Unos por inquietud o curiosidad, otros por necesidad profesional, otros por obligación. Incluso volví a la universidad. La diferencia es que ahora lo disfruto. Y sobre todo, soy consciente de porque y/o para qué lo estoy haciendo. Cada vez que adquiero un nuevo conocimiento o competencia, cada vez que resuelvo un problema de “enunciado, datos y solución confusos”. Cada vez que me intereso por una nueva área o tendencia, soy consciente de mi evolución, no sólo profesional, sino también a nivel personal.
Ha sido un no parar desde entonces. Cuando miro hacia adelante y veo cómo de rápido cambia nuestro entorno, me doy cuenta de que esta carrera cada vez aprieta más. Hablamos de incremento de la productividad, mejora de procesos, eliminación de desperdicios, gestión eficiente, y un largo etc. Pero la base de todo esto es la FORMACIÓN continúa y el estar en constante evolución. ¿Cómo podemos mejorar si no es a través del aprendizaje?
Las organizaciones de éxito INVIERTEN. Invierten en el desarrollo profesional de sus empleados. Además, tal y como sugiere la revista Forbes en el siguiente artículo, para aquellas otras que atraviesan situaciones en las que el presupuesto para formación es reducido, existen otras soluciones asequibles que pueden ser adoptadas.
- Aprendizaje en acción. Mediante el análisis de problemas reales dentro de la organización
- Círculos de aprendizaje. Grupos de empleados con interés en una materia específica. Comparten el conocimiento adquirido.
- Rotaciones de trabajo. Uno de mis preferidos. Desplazamiento del empleado a una ubicación u oficina diferente. Crea conocimiento y entendimiento multifuncional.
- Mentoring. El mentor comparte su experiencia y conocimiento. Proporcionando valiosos consejos cuando sea necesario.
- Retroalimentación y Coaching. Potenciar las habilidades propias del equipo. La retrospectiva permite trabajar la mejora continua.
- Observación profesional. Técnica de aprendizaje basada en la observación. El nuevo empleado actúa como observador, lo que le permite tener una idea del trabajo que va a empezar a realizar.
- Stretch assignments. Metafóricamente indica una actividad que requiere que nos “estiremos”. Es decir, que nos esforcemos en desarrollarla. Necesitaremos aumentar habilidades y capacidades para conseguir la meta.
- Puestos directivos sin ánimo de lucro o beneficio. Animar a los empleados a ocupar puestos de gestión y/o más responsabilidad. Permite desarrollar habilidades y generar confianza.
- Evaluación del proyecto. En gestión de proyectos, conocido como lecciones aprendidas.
- Visitas a otras organizaciones. Para aprender cómo otros abordan diversos aspectos del negocio.
Así que en conclusión. NO INVIERTAS EN FORMACIÓN PAR MEJORAR PROFESIONALMENTE, TE SALDRÁ MÁS CARO!!
Autor: Gladys Gbegnedji Castaño PMP®
luis alvarez chavarria
NO se quien lo dijo esto, pero a mi me gusta mucho, y lo parafraseo «la vida es una escuela en la que todos los días se aprende algo nuevo, y si no estamos aprendiendo es porque algo esta pasando…y tal vez ya estamos muriendo».
primero, esa inspiración, decisión ,iluimnación…jeje…debe venir interna para seguir en esa formación continua y luego, como acertadamente lo indica existen esas soluciones que las empresas pueden utilizar. gracias por compartir.
Gladys Gbegnedji
Hola Luis!
Muchas gracias por la aportación. Espero que disfrutes mi blog.
Un abrazo!