Un proyecto, en sí mismo, implica un cambio en la realidad conocida, por algo nuevo o diferente. Cada vez estamos más expuestos a escenarios de incertidumbre, de modo que el éxito de la adaptación a ese cambio, depende en gran medida de la capacidad que tengamos de gestionar esa adaptación. Esto se lleva a cabo mediante una correcta gestión del cambio por parte de la organización o la persona responsable.
Según la encuesta realizada por la consultora Paradigma, tan sólo el 61% de las organizaciones cuentan una persona o área responsable con dedicación a la gestión del cambio. La gran mayoría de los proyectos llevados a cabo dentro de las organizaciones, afectan o impactan directamente en el funcionamiento de las mismas. Pueden implicar cambios asociados a procesos, estructura organizacional, personal e incluso gerencia.
Como ejemplo, podemos hablar de proyectos de construcción de nuevas sedes, implantación de nuevas tecnologías, apertura de nuevo mercados, diversificación de servicios o automatización de procesos, entre otros.
El Dr. John Kotter, autoridad en el campo del liderazgo empresarial, ha demostrado que el 70% de los proyectos de cambio fracasan debido a carencias en cuanto a metodología y a falta de enfoque a la hora de ejecutar dichos proyectos.
Me encanta la metodología de cambio desarrollada por Kotter, la cual se basa en 8 pasos para liderar el cambio y ayudar a las organizaciones a llevar a cabo una gestión del cambio exitosa. Te recomiendo leer su artículo “Leading Change: Why Transformation Efforts Fail“ , publicado por la Harvard Business Review.
- PASO 1: Crear Sentido de Urgencia. Para conseguir el apoyo de aquellos que toman las decisiones. Ser capaces de hacer ver a otros como nos beneficiará el cambio.
- PASO 2: Formar una Coalición Poderosa. Juntar a aquellos líderes dentro que la organización que comparten la misma visión. Se trata de establecer un frente común. Cuanta más representación tenga el frente, mayor probabilidad de éxito.
- PASO 3: Generar una Visión de Cambio. De manera que seamos capaces de luchar contra nuestro peor enemigo, la resistencia al cambio. Una visión común de los beneficios, puntos clave y estrategia. Debe ser breve y fácilmente entendible por todos.
- PASO 4: Comunicar la Visión. La visión, junto con la estrategia a adoptar, debe ser entendida por todos. Siempre será de gran ayuda predicar con el ejemplo y ser capaces de resolver las dudas y cuestiones que nos planteen.
- PASO 5: Capacitar a Otros para que Actúen de acuerdo a la Visión. Recompensar a aquellos que, conscientes de los beneficios del cambio, se hayan lanzado a aplicarlos. Suprimir los obstáculos, trabajando con aquellos que se oponen al cambio, para que tomen consciencia de lo que supone que éstos no sean aplicados.
- PASO 6: Asegurar Éxitos a Corto Plazo. En los procesos largos, es importante establecer hitos de éxito asegurado, que permitan reforzar el proceso de cambio y sirvan como motivación. Por ejemplo, pequeños proyectos que no involucren a los opositores, económicamente viables y que nos permitirán agradecer a el esfuerzo aportado al equipo.
- PASO 7: Consolidar Mejoras y Producir más Cambios. Este paso está asociado a la mejora continua y a la evolución constante. Celebrar los éxitos sí, pero seguir buscado qué se puede mejorar, convirtiendo la consolidación en un proceso iterativo hasta conseguir el objetivo buscado.
- PASO 8: Estandarizar los Nuevos Enfoques. El cambio está implantado, debemos afianzarlo y seguir mirando hacia adelante, anticipándonos a nuevos escenarios. Evolución constante.
Me ha gustado mucho también el libro “Gestión del Cambio” de Juan Ferrer, por lo que te invito también a ver el siguiente video relacionado con su libro